¿Puede una marca histórica reinventarse después de casi 30 años sin lanzar un SUV completamente nuevo?
Esa es la pregunta que flota en el aire desde que Lada presentó el Nuevo Lada Azimut, un modelo que no solo rompe el silencio, sino que redefine el rumbo de la firma rusa. Hoy lo analizamos a fondo, sin prisas, porque este lanzamiento dice mucho más de lo que aparenta.
- De vuelta al ruedo: Lada inicia una nueva era
- Un SUV completamente nuevo tras casi 30 años
- Diseño exterior: robustez con lenguaje moderno
- Altura al piso y proporciones pensadas para lo difícil
- Interior funcional: tecnología justa, sin excesos
- Versiones superiores: confort bien dosificado
- Calidad percibida: un paso adelante para Lada
- Mecánicas a gasolina: tradición sin electrificación
- Transmisiones para distintos perfiles de usuario
- Sin versiones híbridas, por ahora
- Producción local: un SUV que se queda en casa
- Precio estimado y posicionamiento
El Lada Azimut es el primer SUV totalmente nuevo de la marca rusa en casi tres décadas. Desarrollado al 100 % en Rusia, apuesta por diseño moderno, motores a gasolina y enfoque robusto, marcando el renacimiento tecnológico y estratégico de Lada.
De vuelta al ruedo: Lada inicia una nueva era
Durante años, hablar de Lada era pensar en resistencia pura. Vehículos sencillos, duros y sin pretensiones. Sin embargo, el mercado cambió y el público también. Por eso, el Lada Azimut no llega como una simple novedad, sino como una declaración de intenciones.
Este SUV compacto representa el regreso de Lada al centro del escenario automotor ruso. Además, lo hace con desarrollo propio, sin depender de plataformas extranjeras. En un contexto geopolítico complejo, esta decisión cobra aún más valor estratégico.
No es casualidad que el Azimut llegue justo cuando los SUV dominan las ventas globales. Lada entiende el momento. Y esta vez, decide no quedarse atrás.

Un SUV completamente nuevo tras casi 30 años
El último gran SUV nuevo de Lada fue el mítico Niva. Desde entonces, solo hubo actualizaciones. Ahora, el Azimut nace desde cero, sin herencias directas, aunque comparte arquitectura con el sedán Vesta.
Este detalle es clave. La plataforma Vesta ha demostrado ser versátil y resistente. Por lo tanto, adaptarla a un formato SUV permite reducir costos y mejorar fiabilidad. Aun así, el Azimut no se siente reciclado. Se percibe actual.
Lada necesitaba un producto así. Y el mercado ruso también.
Diseño exterior: robustez con lenguaje moderno
El diseño del Lada Azimut es uno de sus mayores aciertos. Visualmente, se aleja del pasado cuadrado de la marca. Aquí vemos superficies tensas, líneas marcadas y proporciones equilibradas.
Entre sus rasgos más destacados encontramos:
• Parrilla frontal con el patrón en X, sello visual de Lada
• Ópticas LED integradas con firma luminosa moderna
• Rines bitono de 18 pulgadas
• Pasos de rueda pronunciados
• Franja LED trasera a lo ancho del portón
• Detalles en aluminio que simulan salidas de escape
El resultado es un SUV que no desentona frente a rivales como Dacia Duster o Renault Kardian. No busca ser extravagante. Busca ser sólido. Y lo logra.

Altura al piso y proporciones pensadas para lo difícil
Aunque se ubica dentro del segmento SUV compacto, el Azimut presume cifras interesantes. Su altura al piso es de 208 mm, ideal para caminos irregulares, nieve o terrenos maltratados.
Este enfoque práctico no es casual. Lada conoce su mercado. Rusia exige vehículos capaces, no solo atractivos. Por eso, el Azimut combina estética urbana con capacidades reales.
Por ahora, solo se confirmó tracción delantera. Sin embargo, la marca dejó abierta la puerta a una futura variante AWD, algo que encajaría perfecto con su ADN histórico.

Interior funcional: tecnología justa, sin excesos
Al entrar al Lada Azimut, queda claro que no busca ser premium. Aun así, da un salto enorme frente a modelos anteriores de la marca. El interior se siente moderno, ordenado y pensado para el uso diario.
El tablero integra:
• Pantalla táctil central de 10 pulgadas
• Sistema de navegación
• Asistente virtual desarrollado con Sber y Navio
• Cuadro de instrumentos digital
• Cámara de reversa
• Acceso sin llave desde versiones base
Todo está enfocado en la funcionalidad. Nada sobra. Nada falta.
Versiones superiores: confort bien dosificado
En los niveles más equipados, el Lada Azimut suma elementos que elevan la experiencia a otro nivel, sin caer en exageraciones.
Entre ellos destacan:
• Cargador inalámbrico para smartphones
• Techo panorámico
• Climatizador automático de doble zona
• Sensores con visión 360°
• Portón trasero con apertura eléctrica
Además, el selector de modos de terreno, ubicado en la consola central, refuerza su carácter utilitario. Es un detalle simple, pero muy coherente con el concepto del vehículo.

Calidad percibida: un paso adelante para Lada
Los materiales no buscan lujo. Sin embargo, muestran una mejora clara. Plásticos mejor ajustados, superficies más agradables y una disposición lógica de controles.
Lada entiende que su cliente prioriza durabilidad. Por eso, el Azimut apuesta por soluciones probadas. Menos riesgo. Más confiabilidad.
En ese sentido, este SUV es el más avanzado que la marca haya producido hasta ahora.
Mecánicas a gasolina: tradición sin electrificación
El Lada Azimut 2026 llegará exclusivamente con motores a gasolina. Aquí no hay electrificación, al menos por ahora. La decisión es estratégica y coherente con su mercado objetivo.
Las opciones confirmadas son:
• Motor 1.6 litros atmosférico con 120 Caballos
• Motor 1.8 litros atmosférico con 132 Caballos
• Motor 1.5 Turbo con 150 Caballos (fase posterior)
Estas cifras no buscan impresionar. Buscan cumplir. Son motores conocidos, fáciles de mantener y adaptados a condiciones exigentes.
Transmisiones para distintos perfiles de usuario
Según la versión, el Lada Azimut podrá equipar:
• Caja manual de 6 velocidades
• Transmisión CVT
• Automática tradicional
Esta variedad permite cubrir un espectro amplio de conductores. Desde quienes prefieren control total, hasta quienes buscan comodidad urbana.
No hay promesas deportivas. Hay coherencia mecánica. Y eso también suma.
Sin versiones híbridas, por ahora
Lada fue clara. No habrá variantes híbridas ni eléctricas en el lanzamiento. Aun así, la marca no descarta esa posibilidad a futuro.
Todo dependerá del mercado, la infraestructura y las condiciones económicas. Por ahora, el Azimut se mantiene fiel a lo conocido. Y eso, en su contexto, tiene sentido.

Producción local: un SUV que se queda en casa
Uno de los puntos más relevantes del Lada Azimut es su enfoque local. La producción se realizará en la planta de Togliatti, a partir de 2026.
Por el momento, no se contempla exportación. Este SUV está pensado para el mercado ruso. Al menos en el corto plazo.
Esta decisión reduce riesgos logísticos y refuerza la independencia industrial de AvtoVAZ.

Precio estimado y posicionamiento
El precio estimado del Lada Azimut oscilará entre 2,5 y 3 millones de rublos, equivalentes a 31.000 y 38.000 dólares al cambio actual.
Esto lo convierte en el modelo más costoso de Lada hasta la fecha. Sin embargo, también es el más avanzado, equipado y ambicioso.
No busca ser barato. Busca ser competitivo.




