BMW está preparando un golpe sobre la mesa en el segmento compacto premium. En 2028, el modelo de acceso a su gama, el BMW Serie 1, dará un giro completo al abandonar los motores de combustión interna para transformarse en el BMW i1, un vehículo 100% eléctrico. Pero eso no es todo. Este cambio no solo representa una evolución tecnológica, sino también un regreso a sus raíces mecánicas: la esperada tracción trasera.
Prepárate para conocer todos los detalles de esta transformación que promete marcar un antes y un después en la historia de los compactos premium.

El adiós a la combustión, el nacimiento del BMW i1
BMW ha decidido que el Serie 1 de cuarta generación será completamente eléctrico. Este paso no solo responde a la presión ambiental y normativa, sino también a una estrategia global de electrificación en la que cada segmento tiene un papel crucial.
Como explicó Bernd Körber, jefe de productos de BMW, modelos como el Serie 1 son vitales para mantener la frescura de la marca y conectar con un público joven y urbano. Especialmente en mercados como Francia o Italia, donde los compactos dominan las ventas.
Este nuevo modelo no se llamará simplemente “Serie 1 eléctrico”. Adoptará el nombre de BMW i1, siguiendo la lógica de la familia i, que ya incluye modelos como el i4, el iX3 o el i7.
La vuelta de la tracción trasera: un guiño al pasado
Aquí es donde los fans de la marca bávara pueden aplaudir. El nuevo BMW i1 volverá a ofrecer tracción trasera, algo que se había perdido en la tercera generación, que pasó a una arquitectura de tracción delantera compartida con MINI.
Esto será posible gracias a la plataforma Neue Klasse, que BMW ha diseñado exclusivamente para su nueva generación de vehículos eléctricos. Esta base solo admite configuraciones RWD (trasera) o AWD (total), descartando la tracción delantera por completo.
¿La razón? Sencilla: experiencia de conducción superior y eficiencia optimizada. Y, de paso, devolverle al Serie 1 esa sensación de manejo pura y equilibrada que enamoró en sus primeras generaciones.

Plataforma Neue Klasse: el esqueleto del futuro eléctrico de BMW
La Neue Klasse es más que una plataforma, es una revolución estructural dentro de BMW. Esta arquitectura debutará con los modelos iX3 en 2025 e i3 en 2026, ambos dentro del segmento D.
Algunas de las características más destacadas de esta base son:
- Sistema eléctrico de 800 voltios, lo que se traduce en cargas ultra rápidas.
- Celdas cilíndricas de sexta generación, diseñadas por BMW, pero fabricadas por gigantes como CATL.
- Mayor densidad energética y eficiencia térmica, reduciendo peso y aumentando autonomía.
- Modularidad, lo que permitirá fabricar desde compactos hasta deportivos extremos con hasta 1.360 Caballos de potencia.
Y sí, todos los modelos llevarán como mínimo un motor de imanes permanentes en el eje trasero. Esto garantiza no solo el regreso de la tracción trasera, sino también una base sólida para versiones con tracción total y alto rendimiento.
¿Qué podemos esperar del BMW i1?
Aunque aún faltan tres años para su lanzamiento oficial, ya podemos anticipar algunos puntos clave del futuro BMW i1:
- Diseño renovado pero familiar, con un enfoque moderno y aerodinámico.
- Interior digitalizado, con pantallas envolventes y tecnología enfocada al confort y la conectividad.
- Comportamiento deportivo, gracias a su reparto de pesos equilibrado y tracción trasera.
- Autonomías que podrían superar los 500 km, dependiendo de la batería y configuración.
- Versiones con tracción total para los que busquen más agarre o potencia.
La plataforma también permitirá una evolución constante: futuras actualizaciones podrían incluir mejoras de software, autonomía y rendimiento sin cambiar de auto.

El Serie 1: una pieza clave en la estrategia global de BMW
No hay que subestimar la importancia del Serie 1. Aunque algunos lo vean solo como el modelo de entrada, BMW lo considera una puerta de entrada al universo premium.
Y es que este compacto representa mucho más que volumen de ventas. Es el primer contacto que miles de jóvenes tienen con la marca, un puente entre lo aspiracional y lo accesible.
Por eso, no se han escatimado esfuerzos en hacer del i1 un auto competitivo, atractivo y fiel al ADN de BMW. Un vehículo que no solo reduzca emisiones, sino que también despierte emociones.
¿Será el i1 un digno heredero del legado Serie 1?
Los puristas podrán respirar tranquilos. La decisión de volver a la tracción trasera demuestra que BMW no ha olvidado su esencia, ni siquiera en su camino hacia la electrificación total.
La llegada del BMW i1 marcará una nueva era, pero sin cortar la conexión con el pasado. En lugar de reinventarse por completo, este modelo fusiona innovación y tradición, como solo BMW sabe hacerlo.
El BMW i1 no será simplemente otro compacto eléctrico en el mercado. Será el regreso de la emoción al segmento de entrada, el reencuentro con la tracción trasera, y el comienzo de una nueva etapa para BMW en la que lo eléctrico no está reñido con lo divertido.
2028 puede parecer lejano, pero ya se siente cerca. Y nosotros no podemos esperar a ver —y manejar— lo que este compacto eléctrico premium tiene preparado.